domingo, 14 de diciembre de 2008

Me enamoré de Eli


Después de tres días consecutivos de conciertos, después de unas 20 cervezas sin alcohol (cosa que tiene su mérito), después de unas cuantas horas de falta de sueño acumuladas, después de una mañana de domingo en la FNAC de Callao y una tarde de domingo de centros comerciales para las inevitables compras navideñas, son las dos de la madrugada del lunes 15 de diciembre y después de tragarme mi dosis de pastillas, después de media hora de lectura, después de escuchar dos discos seguidos y dar mil vueltas en la cama, acabo de decidir que soy incapaz de dormir. Y no me lo explico, porque tengo un cansancio impresionante. Así que lo que pueda escribir en este estado, creo que casi mejor que no cuenta.

Estoy triste, y no sé el porqué. Y me joroba profundamente no saber el porqué de las cosas que me pasan. Estos días estaba muy contenta porque para mí, haber conseguido pasar un fin de semana concierto tras concierto, en la situación en la que me encuentro, es todo un logro. Era un reto, no pensé que iba a aguantar, y no sólo lo aguanté, sino que hoy además me he ido con Pancho a la Fnac a comprar discos, libros y demás, y después a comer, y después a tomar café, y lo hemos pasado fenomenal, y no hemos parado de hablar y de bromear, y ... me gusta estar con Pancho, me hace sentir alegre, siempre consigue hacerme sonreir, y eso a veces tiene su mérito.

Sin embargo creo que he pasado de la euforia del largo fin de semana haciendo cosas que me gustan mucho, con gente que me gusta mucho, a la tristeza que viene después de haber conseguido algo que quería con tantas ganas, no sé, como los niños que piden y piden un juguete y cuando lo tienen, lo usan un rato y se olvidan de él, pues lo mismo pero aderezado con la tristeza del después que da la madurez, esa que los niños afortunadamente tardarán tiempo en tener ... (ya dije que lo que podía escribir ahora ...)

Y me jode no poder explicarme mejor, porque estoy segura de que si me pongo lo consigo, claro que lo consigo, pero no lo voy a hacer, y como a nadie le interesa un pimiento mi maldito blog, pues da igual, y al que le interese, ya interpretará mis palabras como quiera, que cada uno es muy libre de interpretar mis palabras como le de la gana.


Por cierto me he enamorado de Eli Paperboy Reed, es que yo soy muy enamoradiza, pero creo que si Eli o Eef Barzelay me dicen algún día ven, prometo que lo dejo todo y me voy.

No hay comentarios: